Habita zonas montañosas arboladas, jardines y viñedos, pero puede encontrársele desde la costa hasta los 1900 metros de altitud.
Fuera de la época de cría los canarios silvestres viven en bandadas que luego se dividen en parejas al llegar la primavera. Hacen los nidos con briznas de hierba, raicillas y vegetales lanosos. Suelen hacer dos o tres puestas anuales de cuatro o cinco huevos, incubados durante 13 días. Se alimentan de semillas, pero no desprecian la comida verde ni los frutos.
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| Canarios silvestres |
Se dice que llegaron a Europa a través de un francés llamado Jean de Bethencourt, heredero de las Islas Canarias, feudo del rey de Castilla Enrique III. Este navegante llevó los primeros canarios silvestres a la ciudad de Cádiz. Por aquella fecha nadie se fijó en los "pajarillos de azúcar", nombre por el cual se les conocía. Fue en 1473, con la conquista de Canarias cuando vieron que estos pajarillos eran una valiosa mercancía, por su canto, su docilidad, lo fácil que resultaba criarlos, etc.
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| Cádiz (Andalucía - ES) |
Para evitar su cría en otras regiones, en u principio sólo se exportaban machos. Durante todo un siglo los españoles tuvieron el monopolio de dicho comercio. Por aquel entonces se consideraba al canario un pájaro muy valioso, un pájaro de ricos y soberanos.
A finales del siglo XVI, ya se podían encontrar canarios en muchos países europeos, tales como Francia, Italia, Holanda, Inglaterra y Alemania, dando lugar a un animado comercio. Pronto, los monjes, los mineros y la gente de los pueblos comenzaron a criar canarios, dejando a un lado a los pájaros silvestres autóctonos de las distintas zonas.
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| Históricamente en las minas de carbón se han utilizado canarios como señal de alarma. Los gases tóxicos como el metano o el monóxido de carbono mataban antes a los pájaros que a los mineros. Si los canarios cantaban no había problema, pero si el canario dejaba de cantar, los mineros salían del agujero corriendo. |
Según los ingleses, por el año 1590, Sir Walter Raleigh llevó los primeros pájaros a Europa para regalárselos a la reina Isabel I. Éstos canarios no llamaron la atención de la reina hasta que empezaron a cantar. En ese momento, la reina tomó los pájaros bajo su protección y empezó a criarlos, tornando su color cada vez más amarillo, lo que les dio el nombre de "pájaros de oro". Con el tiempo, la reina fue regalando parejas de éstos canarios a sus cortesanos como distinción rara y apreciada.
A principios del siglo XVII, ya se criaban más de 8000 canarios al año, Nuremberg (ciudad alemana) se convirtió en centro de la canaricultura. Con los años su comercio aviar se desmoronó como consecuencia de la guerra.
En el siglo XIX, los mineros del Tirol, grandes criadores de canarios, emigraron hacia el Harz por trabajo y allí consiguieron llevar el canto del canarios a su máximo nivel, naciendo el canario de canto "Roller del Harz".
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| Canario Roller cantando |
Tiempo después el canario llegó a Norteamérica. Se seguían vendiendo un alto número de ejemplares al año. La canaricultura Alemana pasó de una mera afición a una cría intensiva, otra forma de negocio.
Durante los 20 años antes de la primera guerra mundial, la exportación de canarios movía muchísimo dinero, considerándose un gran factor macroeconómico.
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